La gastronomía es un arte que va más allá de simplemente satisfacer el hambre; es una experiencia sensorial que nos conecta con tradiciones, sabores y emociones. En este contexto, la leche frita emerge como un deleite culinario que cautiva paladares con su textura cremosa y su sabor dulce. Originaria de España, esta delicia frita se ha ganado un lugar especial en la mesa de muchos hogares y restaurantes. A continuación, te presentamos una receta detallada para preparar este exquisito manjar y deleitar tus sentidos con cada bocado.
Ingredientes:
- 1 Litro de Leche
- Ralladura de un limón
- 2 ramas de Canela
- 130 g. de Maicena
- 130 g de Azúcar
- Aceite de Girasol
- Harina de Trigo Común
- 3 Huevos
- Azúcar y Canela en Polvo (para rebozar)
Preparación:
- En una cacerola grande, vierte la mayor parte de la leche, reservando aproximadamente un vaso. Agrega las pieles de limón y las ramas de canela. Es importante eliminar la parte blanca de la piel de limón para evitar un sabor amargo en la leche.
- En un recipiente aparte, mezcla la leche reservada con la maicena, asegurándote de disolver completamente la maicena en la leche.
- Calienta la leche en la cacerola hasta que comience a burbujear suavemente. Reduce el fuego y cocina durante unos minutos.
- Incorpora la mezcla de leche y maicena a la cacerola, junto con el azúcar. Opcionalmente, puedes agregar una cucharadita de aroma de vainilla. Revuelve constantemente hasta que la mezcla comience a espesar.
- Prepara un recipiente lo suficientemente grande como para verter la mezcla y que tenga una profundidad de aproximadamente dos dedos. Vierte la mezcla en el recipiente y cubre con film transparente, asegurándote de que el film esté en contacto directo con la superficie de la mezcla. Deja enfriar en el refrigerador durante al menos 2 horas.
- Una vez que la mezcla haya solidificado, retira el film y corta en cuadrados del tamaño deseado.
- Pasa los cuadrados de leche por harina de trigo y luego por huevo batido, teniendo cuidado de no romperlos.
- Fríe los cuadrados en aceite caliente hasta que estén dorados por ambos lados. Retira del aceite y colócalos sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
- En un plato aparte, mezcla azúcar y canela en polvo. Pasa los trozos de leche frita aún calientes por esta mezcla, asegurándote de que queden bien cubiertos.
Conclusión:
La leche frita es un postre que combina la suavidad de la leche con la textura crujiente de la fritura, creando una experiencia culinaria única. Con esta receta, puedes recrear en tu propia cocina este clásico plato español y sorprender a tus invitados con su delicioso sabor y presentación. ¡Disfruta de este manjar dorado que deleitará tus sentidos y te transportará a la tradición culinaria española!